Se silencia una voz justa
- por Juan José Aparicio
- 31 oct 2016
- 2 Min. de lectura
Guillermo Cano Isaza
Guillermo Cano Isaza fue un famoso periodista colombiano destacado como cronista taurino, deportivo, hípico, cultural y político. Asimismo fue el fundador del periódico El Espectador y su director desde 1952 hasta el día de su muerte en 1986.

Guillermo Cano es considerado aún hoy en día tras su muerte como un guía y maestro del periodismo colombiano, tanto por su labor y excelencia periodística como por su constante conducta y defensa ética de su ejercicio como periodista. Lamentablemente, al igual que muchos otros periodistas en este país, Guillermo Cano fue victima de un atentado en pro de silenciar su labor periodística, el cual le costó la vida.
Un día miércoles 17 de Diciembre de 1986 alrededor de las 7pm, a sus 61 años de edad, Guillermo Cano Isaza fue baleado en 8 ocasiones con ametralladora en frente de la sede del diario El Espectador mientras conducía su camioneta, arrebatándole la vida. Aunque hasta el día de hoy se considera que su asesinato sigue en impunidad, se sabe que el asesinato fue a manos de sicarios bajo las ordenes de “Los Priscos”, un grupo de criminales al servicio del cartel de Medellín. Tras fallos realizados en 1995 y 1996, se dictaminó a condenar a Molina Yepes por conspiración para cometer el crimen, al igual que personajes como Pablo Escobar, Evaristo Porras y Gonzalo Rodríguez Gacha, todos capos del cartel de Medellín, fueron considerados autores intelectuales. Varios años después, en 2007 para ser exactos, declaraciones de cabecillas de Pablo Escobar, entre ellos alias Popeye, nos dieron a entender un poco más del atentado, su realización y la participación del cartel del capo en el hecho. Durante las investigaciones se asesinaron a 12 personas entre ellas un magistrado, una juez y el abogado de la parte civil. Asimismo el único autor condenado fue Molina Yepes, quien explícitamente pago a los sicarios realizadores del asesinato. La suma otorgada fue nada más que 6 años en prisión. Alias Popeye, declaró que el atentado fue llevado a cabo personalmente por alias El negro Pabón, jefe máximo del sicariato de Bogotá bajo las ordenes de Pablo Escobar. La furia del capo del cartel de Medellín en contra de Don Guillermo Cano ameritaba que su hombre de más alto rango en Bogotá se encargase del atentado.
Repudio Nacional
Tanto ex presidentes de la república, como directivas políticas, prensa, iglesia, gremios, altos mandos militares, líderes de varias actividades y voceros se pronunciaron con estupor para manifestar su repudio contra el atentado, alegando que era la gota que rebaso el vaso en cuanto a silenciar la prensa libre y el oficio periodístico. El constante intento de acallar la libre y honesta labor periodística en este país ha sido muy frecuente por décadas, ya sea por parte de grupos armados o narcotraficantes, o el mismo gobierno y entidades estatales con el fin de impedir que continúe sus implacables denuncias.